Era un equipo menor, iba a ser un paseo y ahí estabamos nosotros haciendo, como siempre, el cuento de la lechera. Ya estabamos alzando la copa Confederación. Pues nada más lejos, vaya chasco, el equipo menor que, paradójicamente llegó a semifinales, como nostros, no serían tan malos entonces, pues eso que el equipo menor va y nos gana. Así que ahora solo podemos aspirar al tercer o cuarto puesto, nosotros los campeones de la Eurocopa. No nos vendría mal un poquito de humildad y de no confiar tanto que siempre que pasamos de cuartos ya hemos ganado. No deberíamos adelantarnos tanto a los acontecimientos y ser un poquito más prudentes que luego nos tenemos que tragar un montón de palabras y retirarnos con el rabo entre las piernes. A ver si aprendemos de una vez por todas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario