GASTRONOMIA VERANIEGA

Como nos suele pasar en verano hemos comido bastante fuera de casa. A mi no es algo que me seduzca demasiado, de vez en cuando esta bien, pero muy a menudo me cansa. Y lo peor es que mi hija en los restaurantes no come demasiado bien así que intentamos no hacerlo demasiado aunque a veces no nos queda otra.
Os voy a comentar algunos sitios donde hemos comido durante nuestras vacaciones de verano.
Las imágenes que os he colgado son de el restaurante Tafona de Santiago de Compostela. Se situa en la rúa Virxe da Cerca, 7, esta un poco escondido en un callejón en frente del mercado de abastos. Ha sido el mejor descubrimiento gastronómico del verano. Cuando vuelva a Santiago como aquí seguro, ya podeis ver el precio del menú y los platos sabian tan bien o mejor (las fotos estan en el orden del menú menos el primer plato que nadie lo tomó) de lo que parecen, el ambiente encantador y el servicio impecable así que es una superrecomendación.
En León cenamos en el Bar Bacanal en el barrio húmedo. No fue una buena elección. Sín duda el peor en relación calidad-precio. Muy caro. Una ensalada, una ración de callos, y una tabla de embutidos, pan y bebida, más de 42 euros. Os puedo asegurar que todo era normalito, el jamón más bien del barato. Eso si las cantidades industriales, o almenos es lo que a nosotros nos parece, acostumbrados a las raciones catalanas, más bien escasitas. Tuvimos que llevarnos en un tupper lo que nos sobró.
En Hernani, el primer día comimos en la Tripontzi Taberna, en el centro de la ciudad en el número 11 de la calle Kardaberaz. Es un bar de comidas, tienen menú por 9 euros de lunes a viernes. El menú dispone de platos fijos con lo típico, ensaladas variadas de primero y de segundo lomo, pollo relleno, hamburguesa, salchichas y luego hay platos que varian segun el día. En los primeros siempre hay algún plato de cuchara y en los segundos algun pescado diferente cada día, de los postres lo mejor el flan y el arroz con leche, todo casero. Nos atendieron muy bien el primer día además de situarnos en una mesa muy larga ya que eramos más de diez. Nos hicimos fijos y cada día nos guardaban la mesa. Son encantadores, la comida es buena y el servicio muy amable.
En Muros, una de las primeras poblaciones de las Rias Baixas gallegas hay el restaurante A Pachanga. Lo conozco desde hace años. Se encuentra en la carretera general. Tiene mesas fuera y dentro y siempre esta lleno a rebosar. Muchas veces has de pedir mesa y esperar aunque el servicio es tan rápido que la espera casi nunca es muy larga. Un lugar ideal para el tapeo. Tapas y platos típicos de Galicia, todo muy bueno, nosotros repetimos cada año que vamos a Galicia y nunca nos defrauda además de ser bastante económico.